jueves, 13 de junio de 2013

Wither (2012) de Sonny Laguna, Tommy Wiklund. El Necronomicón traducido al Sueco.


Wither es otro de los films que pude ver en el pasado Festival Internacional de Cine Fantástico de Madrid, Nocturna. Presentada como una especie de remake apócrifo de Posesión Infernal y como "la película más sangrienta de Suecia" elevó mis expectativas bastante, de manera que a la hora de verla no pude evitar una vaga sensación de decepción que no obstante no me impidió disfrutar la película. Por lo demás un producto correcto, bien realizado y divertido.


Wither toma efectivamente y sin pudor alguno, todos los elementos argumentales y estructurales de Posesión Infernal (alterando el orden de algunos, de manera astuta y muy efectiva, reservándolos para el climax). Un grupo de amigos ávidos de alcohol y sexo (en este caso y como mandan los tiempos, más numerosos y más ávidos de sexo) pasan un fin de semana en una cabaña abandonada del bosque, con nefastos resultados, pues el mal se desata.

Pasando esta vez, del elemento Lovecraftiano representado por el Necronomicón (el vacío no ya del mítico libro ficticio creado por el escritor de Providence, sino de un elemento "catalizador" de los males que poseen  a los protagonistas se nota demasiado, aunque es una torpeza menor), nuestros protagonistas se verán perseguidos por sus propios amigos convertidos esta vez en zombis, más que por espíritus desquiciados como sucedía en el original de Sam Raimi. Y tendrán que defenderse (algunos de manera más brutal y desalmada que otros en una de las escenas más divertidas e impactantes del film) de estos monstruos que les van diezmando uno a uno.


A parte de un reparto de desigual talento (algunos buenísimos otros horrorosos) un fatigoso empecinamiento en granular la imagen y mostrar los colores apagados (cada uno es libre de elegir la opción estética deseada para la fotografía de su película, pero la intención de esta fotografía de ser tan saturada y como digo, granulada, resulta molesta por lo exagerado que es este efecto) y un problema a la hora de mantener un tono unitario para toda la película, tengo algunos problemas que van más allá de la propia película. Esto es, el deseo de su público de que sea una comedia. 

Hay momentos delirantes, excesivos, que provocan la risa casi involuntaria del espectador, cierto. Contados, eso si, dos a lo sumo. El tono del resto del film es de terror puro, o al menos, pienso yo, es lo que pretende. No creo que los realizadores pretendieran hacer un remake de la verdaderamente cómica de la saga Posesión Infernal, Terrorificamente Muertos. Pretendían aterrorizar y asustar. Pero durante el pase había una respuesta humorística a detalles y momentos, sobretodo al final, que me parecieron tremendamente dramáticos. Parece que tras la seriedad del remake "oficial" todos querían ver un remake "fiel" ¿significa esto que el remake de Posesión Infernal fuera cómico? No, definitivamente no, pues la Posesión Infernal original de Sam Raimi no era comedia. 

Digo todo esto porque yo si soy bastante partidario del remake realizado por Fede Alvarez, y me duele cuanto se ha criticado y con cuanta dureza se le ha achacado su seriedad. Señores, Posesión Infernal era terror, Terrorificamente Muertos era la verdaderamente cómica. Y Wither parecía venida a satisfacer esta supuesta necesidad de un remake "cómico". Pues bien, aunque se me contradiga, pienso que Wither es tan seria o más que Posesión Infernal de Fede Alvarez.


Cerrando esta polémica, diré que el film es bueno, impactante y entretenido. No responde a lo que uno esperaría tras una frase como "el film más sangriento de Suecia" pero gore no falta y en cantidades industriales. Las actrices femeninas son guapísimas y tiene grandes momentos de impacto. Pero como digo, la propuesta con un guión más sólido, mejor casting y algún momento extremo más original y menos visto hubiera terminado de quedar redonda. No obstante es un entretenimiento absolutamente recomendable para fans del género, que no quedarán defraudados.




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