Emily repite una y otra vez las mismas tareas diarias dentro de su casa, de modo obsesivo, hasta que se da cuenta, con ayuda de una voz que oye en su interior, una medium, de que está muerta y es un fantasma. Hasta que no logre ser plenamente consciente de su condición y pueda "cerrar" y trascender al siguiente nivel, verá limitada su existencia al interior de esa casa de la que no puede salir. Pero hay algo que le impide hacerlo, recuerda entre brumas, haber sido asesinada violentamente y esto le impide estar en paz. Solo su voluntad y la ayuda de esta medium lograrán hacerla llegar hasta la verdad.
Pude ver la película dentro de el Festival Internacional de Cine Fantástico de Madrid, Nocturna 2013. Debo decir que visto su trailer y argumento era de las que me interesó ver desde un principio. Y a juzgar de como estaba la Sala 2 de los Cines Palafox, no era el único. Luis M. Rosales, director del festival, acompañado de H.P.Mendoza y Anna Ishida, director y protagonista del film respectivamente nos la presentó como "la película independiente más importante del año" y tras su visionado, coincido con el. Y es que las películas independientes de medios escasos pero arriesgadas e inventivas, como esta misma I Am a Ghost, Resolution o Toad Road, se revelaron como las mejores y más interesantes de este recién nacido Festival.
I Am a Ghost no es una película para todos. No lo digo por pedantería. Ese comienzo en que una y otra vez se repiten las mismas escenas desde distintos puntos de vista (levantarse, bostezar, freír huevos, desayunar, ir a la compra, tratar de salir y no poder hacerlo, que están montadas de una manera que sutil y lentamente nos generan una curiosa sensación de desazón, anormalidad y claustrofobia) es difícil. Se trata de uno de esos films en que el espectador ha de ser muy paciente y poner mucho, muchísimo de su parte para meterse en el. A mi mismo podría haberme resultado un poco soporífero o insufrible ese comienzo de no ser porque en cierta medida, conociendo el argumento y las características de la película (realizada con medios escasísimos por solo 6 personas con el claro afán experimental y alternativo que muesta su trailer) lo esperaba. Hablemos claro, hay que tener la mente abierta y tener ganas de ver algo distinto. Afortunadamente yo había visto ya en el Festival la fascinante Toad Road y la no menos interesante Resolution, ambas me gustaron y estaba dispuesto a seguir viendo propuestas diferentes y más experimentales.
Pero aún con eso, el gusto y las preferencias pueden imponerse, yo aquí solo expongo mi opinión, y diré que este film me ha parecido fabuloso.
Si, el comienzo es lento, complicado, la trama se desarrolla con lentitud, parsimonia, sin "sustos" ni escenas cargadas con suspense anticipado. Cosa que como es natural, puede aburrir mucho ¿Pero acaso no aburren también los clichés del cine de terror más convencional? Una familia que se muda a una casa encantada y alguno de sus miembros oye voces, ve cosas que los demás no, y es asustado por lo menos dos veces por lo que luego resulta ser su padre o un animalillo que pasa por ahí, hasta que descubre un misterio enterrado hace tiempo... Si, es algo que nos resulta más familiar, nos entretiene, porque hay diálogos entre personajes, algún "love interest" del protagonista, un tipo malo del pueblo que le hace la puñeta, alguna escena de acción y otra de humor... Todo el tiempo "están pasando cosas". Pero vemos la película y salvo excepciones la olvidamos. Tenemos puesto el piloto automático. Sobre todo aquellos aficionados al terror que con perdón de la expresión, tenemos los huevos pelados de ver este tipo de historias en cine. No quiero decir que sean malas, o que haya que acabar con ellas. Solo que de tanto en tanto, está bien ignorar los patrones establecidos e ignorar un poco las reglas no escritas. Sobre todo si todo ello no se hace porque si, por llevar la contraria, sino que comparte con el cine más convencional su teórico propósito (a parte de recaudar dinero claro) esto es, asustar.
Y si, a mi me asustó y mucho en su recta final. Pero de verdad. Nada de un bote en el asiento, nada de un sobresalto provocado por un silencio de minutos que se rompe por un bramido de los altavoces de la sala a toda potencia, no. Hablo de un auténtico momento de espanto que se mantuvo después como un ligero escalofrío recorriendo mi espina dorsal durante varios minutos después de terminar la proyección. Lo digo en serio.
Y esto en una persona que ha visto -casi- de todo en cine de terror tanto en salas de cine como en casa es decir mucho, muchísimo, y más con los espartanos recursos con los que ha filmado H.P. Mendoza esta cinta.
Habrá quien recrimine su "lentitud". O que no pase nada en buena parte de la película. Pero en realidad si que pasa. Se nos narran muchísimas cosas. Pero a través de una puesta en escena inventiva, de la imagen, de un montaje inusual y muy orientado a mantener el interés y el suspense en cosas aparentemente mundanas que se repiten de manera cíclica. Pero vistas de diferentes maneras y aportando sutilezas que van ampliando el interés por lo narrando y generando progresión dramática. Un montaje abrupto por necesidades narrativas y sutil, cuando se requiere por los mismos motivos. Formando ello una narrativa visual que nos narra la historia a través de la imagen (con hallazgos visuales impactantes y originales a pesar de la escasez de medios) que es de lo que se trata en el cine al fin y al cabo. Narrar historias a través de imágenes en movimiento, si puede ser sorprendiendo al espectador.
¿Que se nos pide demasiado esfuerzo como espectadores para entrar en la película? Es muy probable. Pero os digo que tras sentir auténtico miedo con una película de terror como no había sentido en mucho tiempo, merece la pena. Y si perdemos prejuicios y hacemos el esfuerzo desde el principio, os aseguro que entraréis en la película y os resultará el doble de interesante que un film convencional. Lo malo claro, es que hay que entrar desde el principio, sino no es efectivo y como digo, no es fácil.
Además la película no se queda en el susto, en el terror. Si logras entrar en ella, hay una alambicada construcción fascinante en su desarrollo y una serie de temas y exposiciones visuales de ellos, que animan a posteriores visionados.
Una de las mejores del Nocturna 2013 y de 2013 en género de terror, no hay duda. Recomendada.