domingo, 31 de marzo de 2013

Asesinos (Assassins) de Richard Donner


Si hablamos de Richard Donner podríamos decir tranquilamente que es uno de los directores emblemáticos de la década de los ochenta y buena parte de los noventa. Si bien es cierto que en los últimos lustros ha caído en el olvido, algo que les ha pasado a gran parte de los realizadores de dichos años, tales como Walter Hill (ahora recientemente recuperado), Joe Dante o John Landis entre muchos otros. Sí, tienen sus apariciones esporádicas, pero ni mucho menos con la resonancia de antaño.

Después de dirigir "Maverick" (eso era una comedia, ¿verdad?) acabó inmerso con una película donde Sylvester Stallone tendría que enfrentarse a uno de los actores que más muecas -con permiso de Jim Carrey-, gestitos y sobreactuación puede ofrecer en una película. Adorado por muchos y detestado por otros, sobra decir que yo me encuentro en el segundo grupo. Sobra decir que al final se ha hecho un hueco en Hollywood, atreviéndose incluso a cantar o dirigir. Con lo es un claro ejemplo de que algunas personas nacen con una flor en el culo y que la suerte les acompaña allá donde vayan. Sí, también se lo currará de alguna manera, pero a mí Antonio Banderas lo tengo atragantado y pocas son las películas que llego a soportarle.

Pero no voy a desviarme del tema, que no es un monográfico del actor manchego. "Asesinos" nos muestra como un asesino a sueldo Robert Rath (Stallone) quiere en cierta forma alejarse de una vida de muerte y billetes. Cansancio y por otra parte el tener que estar siempre en la cima son parte de los elementos que le llevan a tal decisión. Pero he aquí que Electra (Julianne Moore) y Miguel Bain (Banderas) se cruzan en su camino para tener que volver a su odioso trabajo. Todo esto con un trasfondo dramático donde el actor de Rocky lidia con el trauma de haber matado al que antes era el número 1 de los asesinos , el cual a la postre también era amigo suyo. Algo que también acabará resolviéndose en el climax final de la película. 


Si hay algo que tiene la película es el nivel de entretenimiento y acción, algo que tiene a raudales. Bien rodada y ejecutada por el director de "Arma Letal". Y es que Donner se ha movido como pez en el agua en diferentes géneros. La aventuras (Los Goonies, Lady Halcón), el terror (La Profecía) o la acción (la mencionada película de Mel Gibson, dirigiendo las cuatro entregas que se han hecho). De ahí que no se amilane en absoluto en ofrecer un producto digno de su visionado y su disfrute de principio a fin.


Aunque Banderolas intente cargarse la película, eso sí. Su nivel de gesticulación es digno de un Jim Carrey sin tomar medicación, la escena donde espera ¿pacientemente? matar a Stallone con un rifle de francotirador se tendría que mostrar en las academias de arte dramático para enseñar qué es lo que no hay que hacer en escenas como esas, toda la película acaba comiéndose hostias por todos lados (yo siempre lo he considerado el "pupas" de la película) y en ningún momento lo encuentro un enemigo a batir o que pueda producirle problemas al intérprete de Rambo. 
Sin embargo, al César lo que es del César, a Antoñito lo considero el elemento divertido de la película. Posiblemente no quisiese eso, pero para mí es el bufón graciosete que llega incluso a alegrar la escena viendo como lo arrastran por el suelo o se come una explosión.
"Asesinos" es sin lugar a dudas una película de su época -a Dios gracias-, donde sabías quien pegaba a quien y el montaje no era una secuencia de planos donde la mayor duración de uno de ellos no llegaba a unos míseros microsegundos (la persecución de coches en "Quantum of Solace" era para matar al montador, al director o a quien la ideó), así que la recomendación casi sería obligada para echarle un vistazo a una de las últimas película de Donner.



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